Plan de comunicación para el Sincrotrón ALBA II

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Plan de comunicación para el Sincrotrón ALBA II

Los últimos meses de 2022, trabajamos con el equipo de comunicación del Sincrotrón ALBA, encabezado por Ana Belén Martínez, y con la supervisión del equipo directivo en la estrategia de comunicación del futuro ALBA II, la evolución prevista del sincrotrón actual con una fuente de luz de cuarta generación. 

El sincrotrón ALBA, en Cerdanyola del Vallès, es la infraestructura científico-tecnológica más grande de España y da servicios a más de 2.000 investigadores y técnicos de empresas de todo el Estado y también del resto de Europa. Con el ALBA II, el objetivo es dotar de nuevas capacidades analíticas a la industria y la investigación para dar respuesta a los retos que tenemos como sociedad en temas como la salud, el cambio climático o la energía. 

Los retos a afrontar eran la necesidad de reforzar la comunicación del nuevo proyecto sin interferir —bien al contrario, el objetivo es sumar— en la difusión del acelerador actual, el ALBA. El ALBA II se encuentra en un momento clave, ya que  se ha iniciado la implementación de la nueva tecnología que lo hará posible, así como la ampliación del terreno. En cambio, ALBA no solo está en plena producción, sino que ha logrado una madurez científico-técnica que se traduce en un gran número de publicaciones y nuevas colaboraciones. 

Desde UbiK media, aportamos una visión externa y la pericia en comunicación corporativa y científica de proyectos de alta complejidad como este. Además, como pasa tantas veces, había que ser muy eficientes con los recursos destinados a la acción de comunicación. 

Los ejes sobre los cuales vertebramos el Plan de Comunicación del ALBA II son tres. En primer lugar, transmitir el potencial científico y tecnológico de la nueva instalación de luz sincrotrón, involucrando actores clave y reforzando el programa educativo. En segundo lugar, aumentar la visibilidad de ALBA II como socio en la creación de nuevas oportunidades en investigación e industria para consolidarlo, así como una instalación de vanguardia. Finalmente, identificamos la necesidad de una comunicación centrada tanto en los usuarios, que han ayudado a definir los requisitos tecnológicos y las nuevas capacidades del ALBA II, como en el equipo interno que tiene que contribuir y percibir el éxito del ALBA II como un proyecto compartido y de futuro. El plan de acciones incorpora elementos como el desarrollo de una marca específica bajo el paraguas de la marca global, así como la organización de actividades científicas y de networking con todas las comunidades de interés. Además, se propone una estrategia digital para que la presencia digital del nuevo proyecto ponga el foco en las necesidades y oportunidades de cada momento, y crezca a medida que el proyecto avanza.

Ahora ya solo nos queda desear todos los aciertos y la suerte al equipo ALBA. Estaremos atentos a cómo avanza el proyecto.